El informe abrorda lo que cada grupo de interés clave puede hacer, tanto de forma individual como colectiva, para alcanzar el objetivo compartido de un sector textil circular. Para ello, el informe identifica tres prioridades fundamentales:
1) cambiar los patrones de consumo
2) mejorar las prácticas; finalmente,
3) invertir en infraestructura.
Estas tres prioridades están interconectadas y requerirán un esfuerzo significativo. En este sentido, la hoja de ruta desglosa este trabajo en nueve bloques de construcción en los que cada grupo de interés puede enfocarse, junto con acciones prioritarias específicas para cada uno. El informe se basa en investigaciones y consultas realizadas con más de 140 actores de la cadena de valor textil. La hoja de ruta desarrollada, consta del informe principal y siete anexos específicos para cada grupo de interés. Estos anexos profundizan en las acciones concretas que cada grupo puede implementar para contribuir a los nueve bloques de construcción.